En un control de rutina, los efectivos de Gendarmería Nacional interceptaron un automóvil que provenía de Salta con destino a Las Termas de Río Hondo, transportando más de siete kilogramos de cocaína de máxima pureza, valuado en más de siete millones de pesos.

El operativo se llevó a cabo minutos después de las 17hs de ayer, cuando personal del Escuadrón 59 “Santiago del Estero” con asiento en Santiago, se encontraba apostado sobre la Ruta Nacional 34 a la altura del kilómetro 796, en la localidad de Pozo Hondo, realizando controles de rutina.

Allí hicieron detener la marcha de un automóvil Volkswagen Gol, el cual era conducido por un hombre -de apellido Sosa- residente en la localidad de San Ramón de la Nueva, Orán, provincia de Salta.

Los uniformados, como lo hacen a diario, le solicitaron su documentación personal y la del vehículo. En ese momento se descubrió que Sosa no era el titular del rodado y no contaba con ningún otro tipo de papel.

Los gendarmes de inmediato solicitaron colaboración al sistema SAG de la institución y establecieron que el vehículo tenía ‘prohibición de circular’ por infracción al artículo 27 de la Ley 22.977, ya que no contaba con la transferencia o cédula azul.

Minuciosa requisa

Ante esa situación, los gendarmes labraron las actuaciones correspondientes y en presencia de dos testigos realizaron el control del automóvil, en cuyo transcurso descubrieron en el sector trasero de guantera del acompañante y detrás del stereo de sonido, varios paquetes.

Al profundizar la inspección notaron que en el torpedo había al menos 7 paquetes compactos, rectangulares, envueltos en cinta de nailon de color amarillo.

Ante la sospecha de que se tratara de droga, informaron de lo sucedido al juez Federal de turno -Dr. Guillermo Molinari- quien ordenó que el conductor y el rodado fueran trasladados a la base de la mencionada institución para una requisa más profunda.

Una vez en ciudad Capital, los expertos analizaron la sustancia que contenían los paquetes y detectaron que se trataba de cocaína de máxima pureza, la cual tenía un peso de 7.200 gramos. Si bien el conductor será indagado en los próximos días por el magistrado Federal, se supo que ante los efectivos a cargo del operativo habría manifestado que el cargamento tenía como destino final una vivienda de Las Termas. El Dr.Guillermo Molinari ordenó que a Sosa se le secuestrara el celular y que quedara detenido e incomunicado.